Debemos tener en cuenta que esta tecnología fue descubierta hace dos décadas atrás, existen países que ya cuentan con ella. Sin embargo como todo proyecto necesita el capital necesario para su inversión y en estos momentos Chile tal vez no cuente con ello, pero en un plazo de seis años es posible.
Poco a poco nuestro país ha incorporado nuevas tecnologías, como es el caso de las centrales de energías renovables y el robot “Da Vinci” basado en la inteligencia artificial, es decir, tan solo necesitamos un plazo que se adecue a nuestra situación económica.
La economía del hidrógeno trae consigo muchas consecuencias y una de ellas es poner fin a la dependencia del petróleo importado y reducir notablemente las emisiones de dióxido de carbono y consigo el calentamiento global.
La Comisión Nacional de Energía (CNE), a través de su Programa País de Eficiencia Energética (PPEE), lanzó el proyecto “Introducción de Motores Eléctricos Eficientes”, lo cual es un ejemplo del progreso de nuestro país.
Todo esto se ve favorecido con el gran respaldo que ha dado la Agencia Internacional de Energía (AIE) al desarrollo experimentado por la política energética chilena en estos últimos años, es decir, contamos con un amplio campo para poder iniciar este nuevo camino de la economía del hidrógeno.
Poco a poco nuestro país ha incorporado nuevas tecnologías, como es el caso de las centrales de energías renovables y el robot “Da Vinci” basado en la inteligencia artificial, es decir, tan solo necesitamos un plazo que se adecue a nuestra situación económica.
La economía del hidrógeno trae consigo muchas consecuencias y una de ellas es poner fin a la dependencia del petróleo importado y reducir notablemente las emisiones de dióxido de carbono y consigo el calentamiento global.
La Comisión Nacional de Energía (CNE), a través de su Programa País de Eficiencia Energética (PPEE), lanzó el proyecto “Introducción de Motores Eléctricos Eficientes”, lo cual es un ejemplo del progreso de nuestro país.
Todo esto se ve favorecido con el gran respaldo que ha dado la Agencia Internacional de Energía (AIE) al desarrollo experimentado por la política energética chilena en estos últimos años, es decir, contamos con un amplio campo para poder iniciar este nuevo camino de la economía del hidrógeno.
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